Por Fernando Gutierrez
El sorpresivo anuncio de que la presidenta Cristina Kirchner será sometida a una intervención quirúrgica -para que le sea extraído un carcinoma papilar- ya se transformó en la noticia política más impactante de estos últimos meses.
cuanto más personalista es el estilo de liderazgo del presidente, mayor será la cuota de inquietud sobre cómo se podrá ver afectado el país, tanto en su economía como en la propia marcha institucional.
"Se trató el tema con mucho criterio profesional, indicando toda la información detalladay necesaria del caso, para ayudar a bajar la incertidumbre pública", señala Fabián Perechodnik, director de la consultora Poliarquía.
Y agrega: "El cómo se ha manejado profesionalmente la situación, desde la Casa Rosada, es un hecho muy importante a destacar".
Cristina estaría reasumiendo sus funciones el 24 de enero ytodo no habrá pasado de un susto, sin mayores consecuencias a nivel político.
"Además, estaremos en período vacacional, donde todo entra en congelamiento y no hay cambio alguno en lo político", afirma el politólogo Ricardo Rouvier.
Tal es así que su posterior campaña electoral estuvo centrada en el concepto de "fuerza" (palabra que recogió de los argentinos que se acercaban para darle ánimo)sobrellevando públicamente su angustia por la viudez, y teniendo que mostrar su firmeza para atender las cuestiones de Estado y ponerse al frente del peronismo.
No sería descabellado suponer que este trance de salud lleve a una moderación en los sectores que actualmente mantienen una postura conflictiva con la Presidenta, empezando por la CGT de Hugo Moyano y siguiendo por los grupos mediáticos más críticos.
"Cualquier ataque dirigido a alguien que está en una situación de debilidad personal y que aún goza de la simpatía popular puede rápidamente transformarse en un boomerang", destacó a iProfesional.com una fuente que transita a diario los pasillos de la Casa Rosada.
Recién en una situación como la que sucedida es cuando se toma conciencia de que ésta es una gestión en la que no se ha realizado jamás una reunión de gabinete de ministros.
¿qué ocurriría con el dificultoso equilibrio de poder interno del peronismo, una fuerza política que está acostumbrada a los liderazgos fuertes, en caso de que la recuperación de Cristina fuese más extensa que la prevista?
Los politólogos no tienen dudas al respecto: se generaría una inmediata guerra por espacios de poder que enfrentaría sobre todo a "La Cámpora" con la rama sindical.
Me parece que plantear las distintas alternativas, es prudente, pero debemos tomarlo como parte de la vida, de las relaciones sociales y de la política. Somos seres humanos.